Maduración de la Frutilla/Fresa: Proteína RIF estaría implicada en el proceso

La frutilla/fresa es una especie muy importante dentro de los planteles productivos españoles, específicamente en Andalucía. Su orientación es muy fuerte hacia los mercados de consumo fresco, por lo que cualidades de maduración de la frutilla/fresa como sabor, aroma, color y duración post cosecha son aspectos que desde siempre los genetistas han venido trabajando. 

Es en este contexto que científicos de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Málaga desde hace años vienen trabajando a fondo los factores que intervienen en la expresión de estos tan relevantes parámetros en la frutilla/fresa, y por lo demás con mucho éxito. Los investigadores del departamento de Biología Molecular y Bioquímica de la Universidad de Málaga han logrado identificar un nuevo gen que regula la síntesis de una proteína altamente protagónica en la expresión de estos aspectos de calidad en el fruto. 

El trabajo de investigación lo han publicado en la prestigiosa revista The Plant Cell, dando así un importante paso en el conocimiento de la fisiología de la maduración de la frutilla/fresa.

La proteína la han bautizado como RIF (Ripening Inducing Factor) o Factor de Inducción de la Maduración en español, la cual es principal a la hora de modular muchos de los procesos que ocurren durante el proceso de maduración de la frutilla/fresa, los cuales son de alto interés de estudio y aplicación para manejo de variables que determinan el momento óptimo de cosecha y consumo como lo son color, aromas, sabor y texturas.

David Posé investigador del Laboratorio de Bioquímica y Biotecnología Vegetal de la Universidad de Málaga y autor responsable de este trabajo declaró “Anteriormente, ya se habían estudiado otras proteínas del mismo tipo, pero con un papel más específico en la maduración, puesto que únicamente intervenían en la regulación de procesos concretos, como por ejemplo la alteración del color” .

Según explica Posé en este caso la proteína RIF tendría un protagonismo mucho más global en el proceso completo, desde su implicación en la síntesis de antocianinas, que son los compuestos que dan el característico color rojo a las frutillas/fresas, la degradación de las paredes celulares en el tiempo, brindando la textura, la síntesis de compuestos volátiles o aromáticos, así como la síntesis de ácidos orgánicos y azúcares propios de esta etapa en la fruta. También el académico añade que RIF participaría en la señalización y síntesis del Ácido Abscísico (ABA), hormona importante en la maduración de los cultivos en general.

Concluyen los científicos que con este gran paso en la investigación de los promotores de la maduración se podría lograr manejar los niveles de esta proteína en el cultivo y con ello esperar cambios en los momentos de maduración, con el consecuente impacto que tendría en la industria y los mercados.

Previamente investigadores del Instituto de Hortofruticultura Subtropical y Mediterránea (IHSM) habían logrado determinar algunos factores genéticos que estarían implicados en la vida útil, consiguiendo así la información genética necesaria para poder desarrollar por ejemplo una variedad que tuviese una mejor duración en anaquel modificando el genoma.

Para aquellas compañías que dedican sus frutillas/fresas al mercado fresco este descubrimiento puede tener un gran significado de avance.

Con este novedoso hallazgo los investigadores siguen trabajando para proponer en su momento estrategias bioquímicas y agronómicas que permitan retrasar a voluntad la maduración de la frutilla/fresa aumentando también consigo la vida útil de frutos así como su calidad para ofrecerla al exigente mercado.

En el equipo científico de la investigación participaron además de David Posé, la doctorando Carmen Martin del IHSM cuya tesis incluye los resultados de este estudio. El proyecto se enmarcó en el programa Starting Grant de la European Research Council (ERC) con un presupuesto de 1,5 millones de euros.